sábado, 12 de mayo de 2012

15·M


Este fin de semana, que se va a celebrar el primer aniversario de la "explosión indignada" del 15·M, quiero compartir a modo de recordatorio/homenaje/o-lo-que-sea una de las cosas más bonitas que me encontré en la Plaça de Catalunya en esos días: una estatua cubierta de post-its con las intenciones-reclamos-deseos-indignaciones-sueños-sueñosrotos de la gente. No sé qué habrá pasado con esos papelitos, probablemente borrados del mapa por la "campaña de limpieza" que inició el Ayuntamiento en una triste mañana de viernes para no dejar ni rastro de ello. Lo único que habrán conseguido es aumentar la sensación de pertenencia del colectivo, la rabia contenida, la indignación, el espíritu de lucha, y darle nuevos bríos cuando justamente comenzaba a parecer desarticulado. Y aunque los papelitos hayan desaparecido, sus mensajes seguro que siguen bien vivos en muchos corazones, muchas almas jóvenes con ganas de no rendirse y seguir adelante reclamando justicia contra los que vendieron el país y les arrebataron el futuro.



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